Retoca la piel que cuelga del párpado superior y las bolsas que se forman bajo los ojos mediante la eliminación del exceso de grasa, piel y músculos.
Duración:
Aproximadamente dos horas.
Anestesia
Se administra anestesia general o sedación por via intravenosa y anestesia local. Necesidad de hospitalización: No suele requerir hospitalización.
Posibles efectos secundarios:
Ligero malestar, sensación de “tensión” en el área de los párpados, tumefacción o amoratamiento. Un lagrimeo excesivo y una disminución de la sensibilidad a la luz durante las primeras semanas suele ser normal. También podrían darse sequedad temporal y escozor o picor de los ojos, pero estos efectos ocurren con menor frecuencia.
Riesgos: Visión borrosa o doble, infección, sangrado, tumefacción de las esquinas de los párpados, ojos secos, formación de pequeños bultos, recuperación ligeramente distinta o una formación de cicatrices , dificultad para cerrar los ojos completamente (que no suele ser permanente), y una posición más baja del párpado inferior que podría requerir futuras intervenciones. La pérdida permanente de visión es un riesgo, pero las posibilidades de que se ocurra son muy bajas.
Recuperación:
El paciente podrá comenzar a leer en dos o tres días y volver al trabajo en un plazo aproximado de entre cinco y diez días. No deberá utilizar lentes de contacto durante dos semanas (tras la evaluación del médico). Tampoco debería consumir alcohol tras la intervención. Las actividades que requieran un mayor esfuerzo y el consumo de alcohol podrán retomarse tras tres semanas. Los moratones y la tumefacción deberían desaparecer tras varias semanas.
Resultados:
Para algunos, este procedimiento durará varios años y para otros será permanente.