Se busca la recuperación de la tersura y vitalidad de la piel de esta zona del cuerpo. Se pueden emplear diferentes técnicas, una de las más extendidas en cirugía son las infiltraciones.
Duración:
Este procedimiento dura aproximadamente entre 2 y 4 horas.
Anestesia:
Se administra una anestesia general para dormir completamente al paciente. También puede emplearse una sedación vía intravenosa combinada con anestesia local. Necesidad de hospitalización: Depende de la decisión que tome el médico asignado al paciente.
Riesgos: Entre los riesgos habrá que incluir aquellos comunes a cualquier cirugía como el sangrado, la infección y los hematomas; y los propios de la anestesia.
Recuperación:
El paciente puede volver a trabajar en tan sólo unos días. Deberá evitarse la exposición solar y cualquier contacto físico con las manos. Tiene que hidratarse la piel con crema regeneradora Las cicatrices madurarán y se alisarán, la recuperación depende de cada individuo.
Resultados:
Conseguimos un aspecto joven y natural en las manos.